Bosanski Petrovac

Budila representan un tipo de joyería de sonido que, con su tintineo, contribuye a mantener el ritmo en aquellas partes donde se baila kolo sin el acompañamiento instrumental adecuado. Fabricados mediante técnicas de fundición, forja y filigrana, con mayor frecuencia de plata y latón o sus aleaciones, fueron producto de la artesanía. Mayoritariamente tenían forma de bola o campana. En la segunda variante en el borde inferior podría haber cadenas con varios colgantes de metal colgados con un aro. Al igual que otras joyas de metal de la región Dinárica (gendari, nadgrudnici, perišani), además de su papel decorativo, también tenían un papel mágico y apotropéico. Había una creencia generalizada en el pueblo serbio de que al hacer ruido, un individuo podía protegerse de las fuerzas del mal y los demonios, de modo que incluso con el ruido de las joyas de metal en movimiento, una joven estaba protegida de alguna manera de las fuerzas sobrenaturales.

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